Generalidades

La enfermedad por hantavirus es una zoonosis emergente producida por virus ARN pertenecientes a la familia Bunyaviridae. Los virus tienen una distribución mundial, y producen en los seres humanos dos formas clínicas graves, la Fiebre Hemorrágica con Síndrome Renal en Asia y Europa y el Síndrome Cardiopulmonar por Hantavirus en América.

Son transmitidas al ser humano por roedores silvestres, reservorios naturales de la infección, que presentan una infección crónica asintomática con viremia persistente y eliminan el virus a través de la orina, saliva y excretas. En Argentina circulan dos especies de virus hanta (Andes y Laguna Negra) y al menos 10 genotipos virales diferentes, 8 de ellos han sido asociados al síndrome cardiopulmonar por hantavirus: Andes sur; Andes lechiguanas, Andes Buenos Aires (HU39694), Andes Central Plata, Andes Orán, Andes Bermejo, Andes Juquitiba y Laguna Negra.

Transmisión

Los hantavirus se transmiten fundamentalmente por inhalación de aerosoles cargados de partículas virales provenientes de las heces, orina y saliva de roedores infectados. Otras posibles vías de transmisión son: contacto con excrementos o secreciones de ratones infectados con las mucosas conjuntival, nasal o bucal, o mordedura del roedor infectado. La transmisión al humano generalmente ocurre al introducirse en el hábitat de los roedores en zonas suburbanas y ambientes rurales, principalmente en los peri-domicilios y durante el desarrollo de actividades laborales, recreativas, o en lugares cerrados como galpones o depósitos infestados por roedores. También existe evidencia de transmisión persona a persona, y por ello, las secreciones y otros fluidos humanos deben considerarse potencialmente peligrosos.

Cuadro clínico

El síndrome cardiopulmonar por hantavirus puede presentarse como un cuadro leve con un síndrome febril inespecífico o llegar hasta la manifestación más grave con insuficiencia respiratoria grave y shock  ardiogénico. Los primeros síntomas son similares a un estado gripal: fiebre 38°C, dolores musculares, escalofríos, cefalea, náuseas, vómitos, dolor abdominal, diarrea sin compromiso de vías aéreas superiores.

Hantavirus

En Argentina se han identificado cuatro regiones endémicas:

  • Norte (Salta, Jujuy)
  • Centro (Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos)
  • Noreste (Misiones) y
  • Sur (Neuquén, Río Negro y Chubut).

En los últimos años se registraron en promedio 100 casos anuales, siendo las provincias de Buenos Aires, Salta y Jujuy las que presentan el mayor número.

Vigilancia

Definición de caso sospechoso de hantavirosis

Persona de cualquier edad y sexo, que presente:

  • Síndrome febril agudo de menos de 7 días de evolución; Y
  • Uno o más de los siguientes signos o síntomas: cefalea, mialgias, náuseas, vómitos, diarrea, dolor abdominal, decaimiento, dificultad respiratoria; Y

Al menos uno de los siguientes antecedentes epidemiológicos:

  • Antecedente de viaje o estadía dentro de las 4 semanas previas al inicio de los síntomas a zonas endémicas y haber realizado tareas laborales o recreativas de riesgo;
  • Haber tenido contacto estrecho con un caso confirmado de hantavirosis

Recomendaciones a la población que viaje o resida en zonas de riesgo

Si va a acampar:

  • Elegir lugares limpios y libres de matorrales y pastizales o leña acumulada, ni con agua estancada.
  • Usar carpa con piso y cierre. Sin agujeros.
  • Si va a cabañas o refugios, deben abrirlas y ventilarlas por varias horas antes de instalarse.
  • Guardar alimentos en recipientes herméticos, resistentes y cerrarlos.
  • No dejar ollas ni utensilios al alcance de ratones.
  • Caminar sólo por senderos habilitados y no caminar por pastizales o matorrales.
  • No recolectar ni consumir alimentos silvestres.
  • Beber sólo agua segura (potable, envasada, hervida o desinfectada).
  • Mantener la basura en recipientes bien cerrados. Si es necesario, enterrarla.

Si va a residir en viviendas, cabañas o refugios ya sean rurales o periurbanas:

  • Colocarse previamente una mascarilla respiratoria y asegurarse que la misma sea impermeable, sellando nariz y boca.
  • Ventilar por varias horas (período mínimo 30 minutos), la vivienda u otro lugar que haya permanecido cerrado antes de ingresar.
  • Después de ventilar, rociar las superficies (pisos, mesas, cajones y alacenas) y el suelo con una parte de lavandina cada diez de agua (dejar 30 minutos y luego enjuagar). Humedecer el piso antes de barrer para no levantar polvo.
  • Mantener los alimentos fuera de los roedores en recipientes con tapa hermética.
  • Mantener los alrededores de las viviendas despejados, limpios y libres de elementos que sirvan de alimento o nidación para los roedores como materiales de desecho, leña, paja, basura doméstica.
  • Desmalezar y mantener corto el pasto en un perímetro de 30 metros alrededor de la vivienda. Antes de desmalezar y limpiar los alrededores de la vivienda, se debe desratizar el perímetro de la vivienda y sellar las posibles entradas a la misma. Tapar orificios en puertas, paredes y cañerías.
  • Colocar 7 cm de pedregullo bajo la base de la casa o debajo de casas rodantes para evitar que los roedores hagan sus madrigueras.
  • Tener especial cuidado en la puesta en marcha de ventiladores y de aparatos de aire acondicionado cuyos filtros o conductos puedan haber tenido contacto con polvo contaminado, roedor o excreta de estos.
  • De tener que realizarlos, cubrirse con una mascarilla. Utilizar las mismas medidas del punto anterior para la limpieza de dichos artefactos.
  • Al acampar hacerlo lejos de maleza y basurales, no dormir directamente sobre el suelo y consumir agua potable.
  • Si se encuentra un roedor vivo: consulte en el municipio.
  • Si se encuentra un roedor muerto: rociarlo con lavandina junto con todo lo que haya podido estar en contacto y esperar un mínimo de 30 minutos. Luego recogerlo usando guantes y enterrarlo a más de 30 cm de profundidad o quemarlo.
Las personas que presenten síntomas de la enfermedad deben concurrir rápidamente a un establecimiento de salud para la consulta y evitar el contacto estrecho con otras personas.

Bibliografía

– Alerta Hantavirus. Secretaría de Gobierno de Salud. Ministerio de Salud y Desarrollo Social. Disponible en: https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/2018-12-19-alerta-hantavirus-version-13hs.pdf

– Boletín integrado de Vigilancia. Número 434. Semana 52. Disponible en: https://www.argentina.gob.ar/sites/default/files/biv_434_semanal.pdf

– Mandell, Douglas y Bennett. Enfermedades infecciosas. Principios y práctica. Octava edición. Volumen 2.

Capítulo 168.

Guía para el equipo de salud. Nº 10. Secretaría de Gobierno de Salud. Ministerio de Salud y desarrollo social. Disponible en: http://www.msal.gob.ar/images/stories/bes/graficos/0000000065cnt-2016-guiamedica-hantavirus.pdf

 

 

 

image_pdfimage_print